(Minirrelato)
Hoy durante todo el día, estuve pensando
en ti, pensaba en lo hermoso que es contar con alguien como tú. Inolvidables momentos compartidos
de una riqueza de amistad que mi añoranza inhala en un suspiro.
Lo que recién me comentaste me causó ternura:: que cursabas el primer año de preparatoria la primera vez que me viste, y pensaste:: “Es la chica más hermosa que mis ojos han visto, me encanta” y que todos los días al salir de la escuela te gustaba pasar por mi casa para mirarme, aunque fuera de lejos, me dijiste que un día ibas caminando por la acera de enfrente cuando me viste conversando con mi novio en la puerta de mi casa,. Y sin dejar de contemplarme, distraído te golpeaste la frente en un poste, que te sentiste apenado, enojado contigo mismo y triste a la vez porque ni siquiera me di cuenta, y que te habría gustado mucho, al igual que tu, yo también te viera.
Y que desde aquél momento te hiciste un firme propósito:: que tu y yo seríamos los mejores amigos.
Bellos recuerdos:
El grupo juvenil, el coro de la iglesia, después; estudiando, patinando en el parque, así transcurrieron los días.
Me gustaba mucho la sinceridad y transparencia de tu alegre forma de ser.
Pasabas mucho tiempo en mi casa porque tus papás eran maestros y trabajaban todo el día. Mi madre te invitaba algunas veces a comer para que no estuvieras solo.
Te hiciste gran amigo de mis padres , mi hermano y tú jugaban en el mismo equipo de fútbol.
Recuerdo que cantabas como ruiseñor
iQue belleza y primor de voz!
Desde entonces se visualizaba tu amor por el arte. Tocabas con gran habilidad la guitarra. Me compartiste tu sueño de llegar a ser un gran músico, de prepararte en bellas artes y también, llegar a formar parte de los mejores grupos musicales y enseñar música tradicional, clásica y artes.
Mi mejor aliado en los juegos de béisbol con las chicas del barrio, siempre buscando agradarme haciendo bromas.
Atardeceres dorados, anécdotas, charlas amenas de buenos amigos, risas.
Una extraña luminosidad pernoctó en tus ojos, cuando me dijiste que te irías a vivir con tus papás a USA, que ibas a estudiar música allá.
En tus cartas me contabas un año de venturas. y después no volví a saber de ti.
Hoy, después de tantos años, una lindísima coincidencia, te saludé en las fiestas del pueblo.
Tu mirada guardó la nostalgia de tus respuestas.
Amor filial, amor de siempre.
Años atrapados en una cáscara de juguete, jamas cambiaste. Hoy eres un gran músico, exitoso compositor y director de música clásica y artes. Te felicito.
El bello valor de amistad genuina perdurará en nuestros corazones mientras respiremos.
Somos viajeros en este mundo y lo más hermoso que podemos encontrar en nuestra travesía, es un amigo sincero.
Lourdes Avila Zapién -México-
No hay comentarios:
Publicar un comentario