DEBERÍAS SABERLO

"Deberías saberlo;
resucito cada noche entre cigarrillos
que se encienden uno a uno para mi mismo...
resucito y me consumo en el humo
de las cantinas y los bares
escribiendo malos poemas
que solo yo entiendo..."

-Mientras ella se abrazaba a mi cuerpo pálido
yo dormía con un ojo abierto
sin saber quien era ,
siempre traté de ser sincero.

Allá afuera nadie pregunta por mí -le dije-
y no hubo respuesta.

Ella sabe quien soy pero me lo oculta,
desde aquí puedo verle y le sonrío...
quien no se ha desvelado en aquellos ojos
de hembra en celo;
-me digo en voz baja a mi mismo-
no quiero hacerle saber cuanta falta me hace
(eso sería una fatalidad).

Trato de dormir, de conciliar el sueño,
cuidándome de lo prohibido,
de no pensar en otras cuando estoy con ella.

De no pensar en las otras
-sí, las otras;

las hembras del olvido,
las que me olvidaron y las que fui olvidando,
las que me consumieron en noches eternas
y por las que derramé mis primeras lágrimas
adolescentes y empecé a escribir poemas
y todas esas porquerías cursis...
hembras sin amor ni odio.

Ella era en sí;
una hembra de lágrimas rotas sin amor
que cada noche abría sus pétalos desnudos
de par en par y me hacía sentir vivo...
aunque fuera solo unos momentos.

Era una hembra sin amor, lo sé,
que detenía el tiempo y me hacía recordar
que allá afuera nadie preguntaba por mí...
ni en las cantinas ni en los bares,
ni las putas ni los borrachos;
aquellos amigos entrañables.

Y los que preguntaban por mí
solo era el cura de la iglesia
y algunos conocidos que necesitaban
algún poema para conquistar a alguna chica
o sólo para tirarsela.

Nadie pregunta por mí
-le digo nuevamente...
pero no hay respuesta.

mientras se abraza a mi cuerpo pálido
me besa la frente y me susurra al oído
-buenas noches amor, descansa-.

Ella sabe quien soy pero me lo oculta.

Le digo -buenas noches amor...
¿alguien ha preguntado por mí?...

Nelson Erick Castillo Inostroza