No es tu gran belleza lo que
hizo que me enamorara de ti,
sino la grandeza de tu corazón,
y además tu alma me cautivó.
Es extraño todo que me pasa
pero por más que lo pienso,
solo tú me das la fuerza
para creer en el amor.
Ese amor que me quema cuando
sueño que estás aquí a mi lado,
que puedo sentirte en mis brazos,
que tus dulces labios y los míos
se sellan en un suntuoso beso.
Pero llegamos tarde los dos,
yo seguiré mi largo camino
tú andarás otro camino, escrito
estaba que el tuyo y el mío
tenían distinto destino.
Yo te esperaré siempre a ti,
por si algún día te acuerdas
que yo te quiero con pasión,
y puedas pensar que estás
locamente enamorada de mí.
JESÚS FANLO ASENSIO -ESPAÑA-
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