jueves, 28 de diciembre de 2017

ATADA A TU RAÍZ


Atada a su raíz un día se encontró
perdida entre aquel evento de tentación
la tarde de aquel día simplemente se entregó
quedando sin aliento, así lo decidió.

Manos ardientes recorrieron la piel
no había sabor a miel
solo sexo entre gemidos
de bajas pasiones y decisiones sin motivo.

No hubo besos, ni palabras...
tampoco las manos se entrelazaron,
solo heridas que ardían
por el fuego entre las manos.

¿Qué bajas pasiones existen entre dos cuerpos?
¡qué daño en los corazones para entregar hasta perder el aliento!
atada a la raíz de un amor tan violento
que no causa amor y sacia el momento.

Perdida entre las raíces de un amor que asfixia
que toma el corazón y mata sin amor
perdida desde la raíz que sale de su ser
atado a su cuerpo, sin vida y placer.

¡Oh Dios! Que pudo matar ese amor
que hizo que la raíz pensara en tal horror
del amor nunca probó, la más bella sensación
y poco a poco murió...

¿Qué destruyó todo y lo quemó?
si la raíz de su ser aun se detiene
y sin reconocer que era ella,
no comprende entre gemidos
que muriendo está de un placer sin sabor.

Atada a su raíz estuve,
dejando pasar una eternidad;
bajo la sombra de aquel árbol
en aquella tarde de verano.

Verónica Beatríz Ortíz Gallegos -México-

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