martes, 19 de junio de 2018

EL NIÑO, ES UNA MARIPOSA AL NACER EN EL CORAZÓN DE MAMÁ...


UNA FLOR, UNA CANCIÓN DEL ALMA... DE SU SER DE VIENTRE DE MUJER...

Siempre en domingo... me voy al huerto... a regar los árboles, las plantas y las flores... y en una rama vi colgado un capullo de oruga de mariposa... Apareciese el sol volando como un ruiseñor en el cielo azul... y del capullo saliese una mariposa volando...

Y cerré, los ojos... y percibí el cuerpo de una mujer... echada en la cama... abierta sus piernas al vientre de su útero materno cual un capullo de rosas... y de él retoñar un niño... como una flor en su planta... Revoloteaba aquella mariposa...

La abuela, lo tomase entre sus manos... y lo mirase... tiernamente... y el niño llorase... a la palmada, y al cortarse el cordón umbilical... la abuela lo curase, y lo bañase,... y lo echase, en su cuna... a la alegría de la madre...

Y abrí, los ojos... y mire mi cuerpo reflejarse en aquel chorrito de agua de la manguera que encharcase el jardín del huerto... Y recordé a mi madre en ese nacer de la lluvia de la mañana que humedecía mis mejillas...

Al verme, una mariposa posada en una hoja de rama revolotear de flor y fruto colgados como capullos de verano y de primavera... y de otoño y de invierno... La vida vuela como la brisa del viento en el mar... A las olas que humedecen las orillas...

La vida, es un poema de amor... Una mariposa, en flor... Un trino de ruiseñor en el cielo azul... de un verso en poesía... La vida es un poema de amor... en esos tus negros ojos que me miran, y en esos tus labios rojos que me besan... ¡Y soy un niño otra vez en el vientre de mi madre!

Manuel Ricardo Pizarro de los Santos

No hay comentarios:

Publicar un comentario