Cansado de morir en la contienda
y tomar el aire que me prestas...
vivo del amor y de la guerra...
con una cruz en la espalda
que deja mi vida, arrasada
por las marcas de tus espuelas.
Nunca fui un ideario
sólo, blanco de los comentarios
que en mi ego, se alimentan,
creo, que he fundado una escuela
de poetas y payasos...
que se burlan de sus penas.
Pero amo... con puro egoismo,
con un amor subversivo
y aún asi... con una total entrega...
soy un verso que busca un poema,
un perro que se cruza en tu camino
y al que tu mano gentil alimenta.
Y cuando no amo... no vivo
y si no vivo... no escribo
y freno el rotar de la tierra
para evitar tus respuestas
mientras lleno un cuenco vacío
con el corazón encogido
y... ojalá, también pudiera...
...con las lágrimas de un poeta.
Luis Maria Saiz Laso
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