Anoche te encontré en un sueño... pude sentir tus caricias
pude abrazar tu cuerpo mientras nos besábamos con ardor
nuestras manos entrelazadas, tu aliento en mis oídos...
piel con piel, sintiéndote mía como nunca...en total éxtasis.
Sé que la exclusividad era imposible cuando te conocí...
pero tú me confesaste que de mí sentías amor sincero.
De un día para otro desapareciste de mi vida...¡y como pesa!
Te hice saber cuanto me importabas... cuanto te quería...
quizás me faltó decirte más explícitamente que te amaba...
pero estoy seguro que tú lo sabías, mi Te Quiero sabía a más.
A veces cuesta decir Te Amo... es más sencillo demostrarlo...
Las semanas transcurren impiadosas... no apareces... sufro...
te anhelo como el primer día en que nos sentimos atraídos.
Tus rutinas amorosas... evoco con devoción, risas y lágrimas.
Extraño la exquisita sensualidad con la que me embriagaste.
Te hice depositaria de mis fantasías más ardientes en versos.
Y nunca una mujer me hizo sentir tan deseado como hombre.
Te extraño tanto... por muchas cosas que me supiste regalar.
Por hablar sin vueltas ni rodeos... sin tabúes. Por tu frescura.
Que hizo reverdecer mi otoño con tu primavera... y ¡como!
Trato de hacerme trampas... pensando que volverás...
que me diste un tiempo de espera, un acopio de fuerzas...
para esperarte con renovadas ansias, y desearte aun más...
Musa de mis versos más intensos... escritos en tu piel canela
Tu ausencia alivio con las poses audaces que grabó mi retina.
Entre nosotros no existen misterios, tapujos ni pruritos...
La pasión fluyó como torrente incontenible desde esa noche...
Noche de confesiones, de anhelos y sueños compartidos...
Fantaseamos tantas veces, en encuentros sin horarios...
Quiero creer que pronto regresarás de un viaje... para revivir...
para recuperar este espacio vacío que dejaste en mi vida...
¿Sabes que te sigo escribiendo poemas en nuestro sitio?
¿que seguís inspirando a mi pluma como el primer día?
Aún me sorprendo como mi cuerpo te sigue sintiendo...
En la noche, en sueños, me pierdo en tu mirada...cautivado.
es la única forma en que puedo estar a tu lado... sin límites.
Un sueño que no quiero que termine... para no apartarte de mí
Pero en cada cruel amanecer no te encuentro junto a mí...
¿Sabes Amor ausente? Espero poder tenerte en mis brazos...
en besos y abrazos interminables. Que sea pronto. No tardes.
¡Cómo pesa tu ausencia Amor silente!. Acude a mi sueño...
No te demores... quiero compartir mucho más contigo...
¡Ven a mí Amor emigrante!. Que el reencuentro sea inminente
Te llevo conmigo, encarnada... en mente, alma y corazón...
para no extrañarte el resto de mi vida...
Jorge Daniel Pérez -Argentina-
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