Ahí están los Alpes. ¿Qué se puede decir sobre ellos?
No tienen sentido. Glaciares fatales, riscos que excéntricos trepan,
un revoltijo de rocas y de yuyos, pastura y rocas, derrubios de ladera,
et l’on entend, quizás, le refrain joyeux et leger.
Quién sabe lo que el hielo habrá marcado en la roca que alisa.
Ahí están, tendrás que dar un largo rodeo
si quieres evitarlos.
Cuesta un poco acostumbrarse. ¡Ahí están los Alpes,
idiotas! ¡Siéntense y esperen a que se desmoronen!
EZRA POUND
Publicado en el blog desibilasypitias
domingo, 25 de agosto de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario