Allí, donde tus soles han dormido
su último crepúsculo;
campanas que rezuman lejanías,
vibrar hondo de luces
y de aromas.
Allí, donde tus pasos
llevan a lo profundo, bordes
finales de lo andado.
Allí, donde el silencio se estremece
en alientos de estrellas y de sombras.
Allí, donde cabalgan tus mil vidas,
tus mil sueños perdidos, anegados
en no sabes qué vueltas, qué rincones.
Allí
te espera ella, blanca y sola,
un ramo mustio entre sus manos pálidas
y una lágrima extraña
en sus ojos vacíos.
Del libro El silencio se estremece de
ANTONIO ABDO
Publicado en Cuadernos de las Gaviotas
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