Se cruzaron las jarcias, la tuya y la mía
Amarradas ambas a iguales sueños.
Analogía de alegrías y tristezas
Sellaron por siempre nuestros destinos.
Ambición de cielos, horizontes lejanos,
Misterios de luna, caricia de soles, caracoles
De estrellas pegadas al cielo.
Fuimos andando por huellas olvidadas
Dejando estelas que también serían olvido.
La luna dejaba su sonrisa cómplice, en ese
Camino asfaltado de plata, con manos de
Espuma, cincel de magia.
En la cavidad de lo inmenso, crujían tus huesos,
Tiritaban los míos. Rogaba la suerte que tu
Piel curtida se dejara abrazar por la siguiente ola.
La vida pasó por tus jarcias dolidas, en las mías,
Se fue destiñendo la vida.
Tú decidiste buscar tus recuerdos, recostado allí,
Sobre la húmeda arena, perdiendo tu piel, tus
Huesos mojando.
Yo quedé, aquí, juego con la escollera, con la
Gota del mar, con la brisa que llega, amaso
Los tiempos, refresco mis pies y busco otros
Pasos con alma marinera.
Alicia Beatriz Gorospe -Argentina-
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