MÁNDOTE SIEMPRE

Mirando a la luna te hablo
muy quedo, casi es un suspiro
distante mis palabras que se elevan,
sobrevolando a través del viento.

Mirando a la luna he vuelto a soñar
despierta y, te he dibujado en mi imaginación.
Presente siempre te llevo en mi pupila
que hace latir con ímpetu mi corazón.

Mirando a luna llena te encumbro.
De nuevo escribo tu nombre
con el pincel de mi mente y, vuelvo a
sonreír al ver en él, tu cara dibujada.

Una lágrima furtiva se desliza por mi mejilla,
soñar con abrazarte, es mi mejor pesadilla.
Codiciando el calor de tu cuerpo amado,
desnuda de melancolía, siempre… mirando a la luna.

Juana Campos Cortés