CAMINEMOS

Caminemos bajo la lluvia de
nuestros invierno, el sol de
aquel verano calienta los pies
de un suelo mojado, los tulipanes
secos reverdecieron en la primavera
de los besos, la noche pretendida
se disfrazó de día y el destinos
fingió ser casualidad.

Caminemos sobre la tela delgada
de lo que fue, intactas están las
huellas de mil suspiros verdes,
conservan el aroma de infinitas
batallas que el tiempo guardó,
la piel reclamó y el corazón
conoció, cuerpos amándose
en el remolino con sello de ayer
y garantía de siempre.

Caminemos en la tierra del olvido,
toma mi mano y lleguemos al jardín
de lo escondido, escuchemos los
gritos de aquellos besos que
pensábamos muertos, viven en silencio
profundo de otra época, hambrientos
de revivir en nuestra boca, sedientos
de inundar con amor nuestras venas.

Caminemos desnudos bajo la luna
de otoño, desvistamos los besos
viejos y arropémoslos de aliento
nuevo, saliva fresca con sabor
de miel, del panal de nuestros
labios, cultivemos en nuestros
cuerpos la semilla de un amor
que rompió la lógica, quebró la
distancia y venció la incertidumbre,
porque después de mirarnos,
nunca más seremos más ausentes.

Luis Emilio Tigüilá Robles -Guatemala-