TÚ SABES

Tú sabes,
porque conoces el viento
y le hablas,
que te beso en vendavales
cada madrugada...
Sabes,
porque caminas
por todas las colinas
y sientes la fuerza de mis montañas...
Sabes,
que tengo tu verdad
entre mis piernas
y a tu boca presa,
saciándose en mis entrañas...
Tú sabes,
que el mar me impacienta,
porque eres semi Dios
y no me traes santidad ni calma...
El agua,
te lleva mi áspera caricia
y te toca,
con desquicio, descontrolada...
Mis dedos,
se escurren
desde mi piel a tu playa,
besando impertinentes
a tus dunas de arena mojada...
Y allí,
en el clímax de tu marea,
me quedo acostada,
sin temor de que el mar
con codicia nos mire
y nos lleve en su tormenta,
al verme gozar en tu cuerpo abrazada...

Diosma Patricia Davis -Argentina-