De río y selva no están hechos mis huesos
Porque del polvo soy como mi padre
Como él nací más allá de esa orilla
calurosa
donde no siempre llueve
Por eso
agua y calor son palabras
que suenan
en la oscura garganta de mis días
El Orinoco nunca duerme
La piedra tiene los ojos cerrados
Aunque siempre vela
Del libro Poemas de la Angostura de NÉSTOR ROJAS -Venezuela-
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