EN EL FONDO DEL MAR

Iba en un submarino,
controlando el fondo marino,
incluidas las especies en extinción,
controlando su evolución.

De repente, vimos una especie extraña,
tenía una mirada que engaña,
supimos de su veneno,
que enfrentarse a él,
no era bueno.

Era de un color rojizo,
posando con algún que otro rizo,
dando belleza a la naturaleza,
del color, de su fuerza,
incluso en el fondo del mar,
la boca se te puede atragantar,
viendo un bello panorama,
que solo lo puedes ver en la cama.

Teníamos que salir,
pero sin tenernos que confundir,
pues podrían aparecer tiburones,
por cualquiera de sus rincones,
y es que el reino es enorme
y quien no le gusta, no esta conforme.

El submarino era militar
pero un buen uso, se le pudo dar,
lo conocían como el Octubre Rojo,
y a algunos que a otros,
se les notó el enojo.

Volvimos al centro de mando
donde dialogamos de vez en cuando,
dando informe a nuestros superiores,
de lo que nos encontramos en los exteriores,
y dando gracias por nuestra actuación,
nos invitaron a ir a nuestra habitación,
para descansar unas horas
y volver de nuevo, sin demora.

Nos dieron un descanso,
que para mí fue eterno,
lo que no nos informaron
es que iríamos al infierno,
a una guerra con Estados Unidos,
porque el Kremlin lo había decidido.

Mala situación,
en un mundo en comunión.

JAUME ALEGRE LASTERRA -Barcelona-