Las flores muestran sus pétalos
a tono con su fragancia,
miro la pulcra figura
con dotes de elegancia.
Las miradas emanadas
priman de blanda ternura,
se tornarán agraciadas
al sentirse esa dulzura.
Con la venia de sensores
se dan reales sensaciones,
a lo interno sobrios sabores
proporcionan emociones.
En el pecho el palpitar
hay corazón expandido,
un constante meditar
se siente correspondido.
Admirables pretensiones
se perciben en mensaje,
vislumbran así pasiones
tras la sombra del ramaje.
El viento con sus caricias
en perenne transitar,
quiere proveer delicias
con su don de gravitar.
Ilusiones sorprendentes
nacidas por intuición
surgen sensores candentes
en almas sin distinción.
Sin llamarle ha llegado
al conciliarse razones,
amor... se ha posesionado
en apacibles corazones.
José Rafael Orozco Torres -Costa Rica-
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