ADÓNDE EL TIEMPO NOS LLEVA

Adónde el tiempo nos lleva,
dónde no exista el cuerpo,
y el alma se pierda,
quiero llevarte conmigo.
Porque en la nada callada,
en la brisa, en el viento,
en la brizna de hierba,
en la nube andariega,
algo de nosotros queda.
Quisiera que así sea,
ni que fuéramos piedras,
solitarias de río, quiero tenerte,
conmigo, llevarte conmigo,
para que estemos juntos,
siempre juntos tal siendo,
aguas, hojas o piedras.
Adónde el tiempo nos lleva,
en la brumosa distancia,
donde solo queda la niebla,
y la mañana y su instancia.
Yo quiero estar contigo,
siempre contigo.
Tal vez seré el rocío,
y tú mi hoja de hierba,
donde reposo contigo,
todo lo que no he dormido,
y tú con el viento me lleva.
Sería un crimen grave,
que el tiempo destruyera,
esos pechos, los tuyos,
que la muerte hambrienta
se comiera ese cuerpo.
Adónde el tiempo nos lleva,
donde no exista el cuerpo,
y solo nuestras almas quedan,
yo quiero llevarte conmigo,
dónde, sin que nadie lo sepa,
algo de nosotros queda.

Rafael Pérez