Tiempos que asolan y arrasan,
espinas dolientes y escupir de palabras,
arrebatos inconfesos, injusticia amarga,
desencanto de vida, tristeza de alma.
Tiempo que roba y arrebata,
rutas que no tienen fin
nadie sabe dónde acaban,
pasar de vida sintiendo puñales que te clavan.
Dolor en aumento, se acentúa y no calma,
presa me siento en este dolor del tiempo,
poca claridad y niebla a cada momento.
En perpetuo desorden me desconcentro,
entre telarañas y harapos me muevo,
no hallo semilla que germine algo nuevo,
el agua embotellada no se presta a ello.
Mórbida, enferma me presiento
en esta felonía de vida que llevo…
tanta deslealtad me confunde y me pierdo,
traiciones de miradas que no entiendo.
Vivir en este estado no es bueno,
ya no hay acacias, los leopardos se extinguieron…
caminamos desandando –como cangrejos-
vuelta a la inquisición – te arrastro de los pelos-.
Quisiera soñar…
ver banderas blancas alzando el vuelo,
volver a oír el trinar de los pájaros –aquellos que se fueron-
reencontrarme con los amigos –desde el primero-.
Hoy ha salido el sol,
en mi ventana-corazón simiente de margarita,
augurio de nube que la germine,
presagio de futuro –asomo de luz que nace-.
LOLA WIZNER
DE FACEBOOK - 5729 - PAPELETAS
Hace 7 horas
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