Pasa el tiempo entre las sombras
que oscilan en las paredes de la alcoba,
la luz se refleja en los cristales
piensas en las respuestas, pero no sabes
si estás conmigo, o estás sola...,
si somos solo amigos..., o amantes.
Pero amas, con tal delirio
que ruedan por el piso los anillos
a los que te sentías atada
antes de desenredar las ramas
de tus pensamientos sombríos
y hacer pedazos la almohada.
Velas mis campos dormidos
tras de haber sucumbido
a desconocidos instintos...,
una botella vacía de vino
rueda alrededor de la cama
para distraer tu mirada
y quieres compartir su destino
pero ya te sientes cansada
y aún no te has decidido.
Me abrazas desplegando las alas
con que antes te desatabas
para cambiar tu destino,
estoy a tu lado, espero contemplativo
porque el amor no me cansa
y menos..., cuando es contigo.
Luis Maria Saiz Laso
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