A nuestra amada tierra
que nos permite la vida,
debe ser la consentida
y por la vida se aferra.
De los llanos a la sierra
o de la pampa a la estepa,
hay que luchar que se sepa
que somos hijos de ella,
por ser esa madre bella
que dar amor nos increpa.
Mi versar libre se aferra
de una manera ardiente,
que tengamos muy presente
la prevención de la guerra,
desterrando de esta tierra
las dolencias que fulminan,
y poco a poco exterminan
la raza humana y su entorno,
volviéndose vil bochorno
las causas que la asesinan.
Por eso se vuelve urgente
desarrollar la conciencia,
poniendo técnica y ciencia
como vital ingrediente,
cuidando del medio ambiente
con ahorro y reciclaje,
para que nunca el paisaje
de la madre sea cambiado,
sino seremos enviados
a nuestro inicio salvaje.
Catastróficos eventos
cada año estamos viendo,
la humanidad sufriendo
la furia de los elementos,
solo uniendo pensamientos
lograremos el revertir,
lo que tanto hace sufrir
a nuestro amado planeta,
sin dudas esa es la meta
que juntos vamos a cumplir.
ROBERTO BATISTA PARGAS -Cuba-
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