NO AMO TAN SÓLO TU CUERPO.

No amo tan sólo tu dócil cuerpo desnudo sobre mi mástil,
ni tu piel trigueña, ni tus ojos miel, ni tu rincón turquesa emancipado,
ni ese lugar oloroso y secreto que mi persistencia goza tanto,
convexo vital, y explosión de espasmos que nos cubre como manto.
No amo tan sólo tu cuerpo, No es tu boca, no son tus atrevidas manos,
que son el encanto, ni las montañas vibrantes de tus afanados pechos,
ni es tu espalda lineal, suave, recta y firme, ante ella. Sí, me quebranto.
Ni es tu purpura ombligo, agujero en el que bebo agua mineral,
como niño mal educado y caprichoso con esa sed perpetua y suicida.
No amo tan sólo tu cuerpo, ni el cruzar de tu mundo por mi asta,
ni es tu lengua de víbora constrictor, mojada y ensalivada, no es,
ni amo la flecha de avispa en aires todos densos que son tus caderas ,
ni la humedad abrazadora y caliente de tus encierros carnales,
no es eso, sólo es el amor, que desprendes al preciso instante,
en que toda pálida y resquebrada de pasión cruzas la puerta.

Gabriel Sanz -Sdyney-