TÚ
No sé quién eres... ni de donde vienes, de repente llegas a mí... y todo mi ser, mueves... y yo, me quiero enamorar... de esa flor, en tu corazón y de pasiones inmensos... háblame de ti... tú, dime como son tus suspiros, tus arrumacos, tu sensibilidad para amar, dime que yo podría besar... esa húmeda ansiedad, cuando amar, tú te lo propones... tú, la de la fragilidad, la sutil... la que de repente llega y ocupa un lugar en mi mesa, para compartir alegrías y tristezas... inquietudes y sentimientos, la que ocupando está ahorita todos mis pensamientos... sí, tú... háblame de ti y que al contemplar tu rostro de amores, mi alma enamorada entre por tus ojos y que ahí haga nido de amor, y de pasiones...
Me acordé de ti
Me acordé de ti, de tus besos, de tus ojos color miel, de nuestros anhelos... de lo bonito que pudo ser, hasta de tus celos... me acordé de ti; María... de lo mucho que me querías, que no supe apreciar tu amor, cuando eras mía... me acordé mucho de ti, mis noches frías, ahora sin tu amor... tan vacías... me acordé de ti y un suspiro atravesó e hizo eco dentro del silencio, el corazón me dice que aún te sigue queriendo mucho... María...
Te quiero así
Así como eres tú, te quiero así... No hay más, cuanto gané al conocerte!... Tu amor es mi deleite, que buena es mi suerte!... mi linda princesa, mujer de una sola pieza, te despides de mí, y yo me quedo aquí por ti suspirando... me deleito al verte partir, hasta para partir y caminar al paso, eres un encanto!... te amo tanto!... cuidaré tu estrella, no tendrás de mi queja... y en tiempos de tempestades grises, seré buen temporal a tus ojos, procuraré nada te derrumbe, no quiero perderte, mujer me has enamorado el alma... aquí estoy para ti, te cuidaré como se cuida el oro, la plata, como se cuida rubíes o lindas esmeraldas... Te amo
Agustin H. Castaneda
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