EN PENUMBRA

Si en la penumbra mis sílabas, las cautivas entre tus labios dejaran de ser monótonas,
encadenarás el universo al venero de tus venas
yo arrayán prisionero de tus hojas lanceoladas,
si en la penumbra portadora de un susurro de sinfónicas marejadas
se adhiere Artemisa al malecón de tus besos, pincelarás mis oídos
con una luna de alfabetos, comitiva de suspiros,
si en la penumbra la huella de polen cauce de tu aliento hibernara,
alisios tenaces de otoño eternizarían el vuelo de esporas,
intervendrían el destino con su ballet y célibes reposarían airosas,
si en la penumbra se profetizan frases imantadas de insomnios
yacidas en deriva, el cruce con el oráculo sensible a la eternidad
y su singladura, plegarias, serás lámpara en las tinieblas de mi otra orilla.

Manuel Vílchez García de Garss