miércoles, 6 de marzo de 2013

DÍA PARA NO ESTAR


Vete, día maldito;
guarda bajo tus párpados de yeso la mirada de lobo que me
olvida mejor;
camina sobre mí con tu paso salvaje, simulando un desierto
entre el hambre y la sed,
para que todos crean que no estoy,
que soy una señal de dios sobre las piedras;
cierra de par en par, lejos de mí, tus fauces sin crueldad
y sin misericordia,
como si fuera ya la invulnerable,
aquella que sin pena puede probarse ya los gestos de los otros;
y tiéndete a dormir, bajo la ciega lona de los ciegos,
el sueño en que me arrojas desde ayer a mañana:
Aun así, he de llegar contigo.
Aun así, has de resucitar entre los muertos.

Del libro Obra Poética de Olga Orozco
Publicado en la revista Estación Quilmes

No hay comentarios:

Publicar un comentario