miércoles, 27 de marzo de 2013

QUE SIGA LLOVIENDO Y TE MANTENGAS VIVA


Poema leído en Conil, dentro del programa "Grito de Mujer 2013"

Que siga lloviendo y queden limpias las calles,
que siga lloviendo y crezca el trigo,
que siga lloviendo y tu risa sea respuesta
en tus sentidos limpios.

Que lágrimas de alegría
sean vergel en tu cuerpo
preñándote de vida.

Que tus dolores vuelvan
al parir miles de amapolas y margaritas.

Que siga lloviendo
y te mantengas viva.

Que siga lloviendo
y por fin puedas ver claro el día tras los cristales,
porque al fin acabó la inmundicia.

Lo apuesto todo
para que aprendas a coser al vestido,
labrados que te hagan sentir el entramado de la vida sin menoscabo,
justo en el instante de rematar la cremallera.

Brindo porque consigas ser lluvia,
agua clara, transparente y fina…,
que mires desde arriba cómo los ríos crecen
hasta llegar a la mar,
sin más premisa que tu libertad.

Y vuelvo a chocar las copas,
amparada por un enorme grito,
para que nunca vuelvas a mantenerte a escondidas
cuando la llave toma forma en la cerradura
y de nuevo sientas miedo por concebir pisada tu dignidad.

Y grito muy fuerte,
desde el lugar más alto posible,
desde el campanario que toca al ángelus,
desde la torre del vigía que avista un barco a punto de atracar,
desde el pico más alto
para que el eco ayude a mi voz en la vuelta de mi alarido.

Que quiero darte la mano o abrazarte,
pretendiendo dar sentido al caminar
en tus noches a oscuras de vida.

Que siga lloviendo,
sí,
que tu piel despierte de las heridas
y se convierta
en delicada lluvia que embelese los sentidos.

Que tus ojos vuelvan a brillar,
y ofrezcan un dulce buenos días para
quitarle la razón a la razón de ser
y por fin,
te mantengas viva.

Lola Fontecha 

No hay comentarios:

Publicar un comentario