miércoles, 28 de noviembre de 2018

ALMAS GEMELAS DESESPERADAS


Amanda, una mujer de 40 años, buscaba desesperada amor de pareja, su alma gemela aún no la corteja
Stiven, un hombre de 42 años, buscaba el alma gemela pero solo en su corazón le hacían daños
Eran vecinos y siempre se saludaban; los dos urgentemente a su media naranja buscaban
Amanda, se enamoró de un policía; pero él se aprovechó de su nobleza, le robo su dinero y hasta las monedas de la alcancía.

Stiven, de una modelo se enamoró; se sació de él y una parte de su riqueza devoró
Amanda, nuevamente le abrió su corazón a un abogado; él al poco tiempo se aburrió de ella y en pena moral nuevamente había quedado
Stiven, se enamoró de una enfermera, ella a los días lo abandonó, por irse con un hombre de la nueva era
Amanda, desesperada a un hombre pobre buscó; pero según él, ella no le hacía bien el amor, por eso la dejó.

Stiven, se enamoró de una chica campesina, a los tres días lo abandonó; para ella, él era muy delicado, y ¡por siempre lo condenó!
Amanda, tenía miedo porque pensaba que iba a vestir santos, deseaba irse de monja y olvidar sus amorosos quebrantos
De Stiven, sus amigos comentaban que era un cuarentón; pensaban que cambió de gustos por eso era solterón
Ellos parte de sus vidas pasaron en busca del alma gemela, pero siempre se equivocaban; hacían todo rito de amor, hasta en los santos se encomendaban.

Un día Amanda, aburrida, salió al parque a llorar; una voz le dijo, buenos días vecina, ¿me puedo con usted sentar?
Amanda, levantó su cabeza y observó que era su vecino; ella le dijo, claro que si Stiven, dialoguemos a ver si me animo
Ambos empezaron a conversar, de sus fracasados amores comenzaron a hablar
Las risotadas no se hacían esperar, recordando sus malas experiencias en el amar.

Después de dos horas, una mirada penetrante los sedujo; salían de sus pupilas chispas de colores, parecía un amoroso embrujo
Él, la invitó salir, ella aceptó; desde ese momento empezó el amoroso vivir
En una cena romántica un gran beso se dieron; dos almas gemelas se encontraron y por toda su vida se amaron
Se enamoraron mutuamente; a sus vidas llegaron dos hijos y los cuatro viven felizmente.

A veces el amor de la vida está a tu lado, solo debes intuirlo con tu espíritu alado
No busques afuera lo que está dentro de tu alma, vive feliz y haz las cosas con calma
El verdadero amor nace de tu corazón, por eso se sabio en toda decisión
Gracias Dios, porque tú eres mi amor; a ti te rindo por toda mi vida honor.

Yider Elder Araque Cerón

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