Anoche mientras dormía
mi alma se desnudaba
y perfumada en ternura
en la tuya se acurrucaba.
De celos tú te morías
con tanta felicidad
y prisionera en tus brazos
llegó un nuevo despertar.
Ya con los pies en el suelo
volví de nuevo a soñar
soñar despierta es más crudo
y me aterra la realidad.
Sueño con un mundo nuevo
en el que pueda confiar
sueño con poder dormir
y tranquila despertar.
Sin que me oprima la angustia
del recibo sin pagar
de ése hijo luchador
que merece trabajar.
Es un sueño que me ahoga
y me oprime la garganta
una pesadilla injusta
cuando perdemos la casa.
No sé si Ada Colau
será un "Hada" verdadera
que aporte algo de luz
a que haya una ley nueva.
Una ley que nos consuele
y podamos seguir soñando
sin que a media noche tiemble
mi cuerpo de un sobresalto.
Díce el gobierno que Ada
induce al terrorismo armado
comparándonos con ETA
a ciudadanos honrados.
Ellos si son terroristas
de nuestros sueños truncados
que entre recorte y recorte
nos estamos suicidando.
Siempre empiezo mis poemas
con la belleza del alma
pero acabo reflejando
una realidad insana.
Menos mal que el pensamiento
me eleva a cualquier lugar
de vez en cuando me voy
más allá de la maldad.
Intento buscar rincones
en lo más hondo de mi ser
que no esten contaminados
y me produzcan placer.
Me refugio en mi interior
en mi parcela privada
donde nádie tiene acceso
ni puedan contagiarla.
La poesía es mi momento
mi vivir y mi pesar
mi alegría, mi tristeza
mi calma y mi tempestad.
JUAN RUIZ MORAL
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