“Querer olvidar a alguien significa pensar en él.” Jean de la Bruyère
Un día, de noche,
rescataré tu voz
de los acantilados,
mutilaré la hierba
de las puertas
cerradas,
destaparé
grietas humedecidas,
descubriendo la América
de obstruidas
reminiscencias.
Tres carabelas
tocarán tierra firme,
lo desgastado
será alborada
del nuevo Sol.
“La Niña”
semilla de océanos
meciendo
el oleaje
de mis decretos.
“La Pinta”
paleta colorida
esbozando
escenarios
sin arena movediza
y…
“La Santa María”,
pureza vertida
concibiendo
sumatorias
de cercanos
confines.
Del viejo mundo,
ristras escaldadas
yacerán
con los ojos abiertos.
¡Lloverá!
Ríos de cielo
lavarán la estampa
de corroídos galeones
eliminando el polvo
del asustado
mapa estelar
de mi memoria
¡Cantarán las estrellas!
Su melodiosa sinfonía
será el adiós
de tan pronunciada odisea,
deslucido fantasma
de mis miedos asesinos.
Gaviotas danzarán
animando la apertura
de gigantes girasoles
y ese día, de noche,
la sombra arrodillada
de tu soledad suicida,
liberará los reos
de tus depresivos
argumentos,
esclavos intelectuales
de mil relojes
muertos.
Araré la arenisca
del recién nacido
continente,
vestiré de luna negra
el mascarón de proa
que tallé con tu madera,
y esa noche, de día,
encallarás
sin brújula
a la orilla del mar.
Scarlet C
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