lunes, 31 de diciembre de 2018

RENUNCIO


"Renuncio a ser marioneta del canto de los gorriones que vuelan a trompicones buscando ecuanimidad.
Renuncio a la caridad de quién se llama persona y vinagre solo dona desde su lengua voraz".

Carmen Azparren Caballero

***

Renuncio. 3 de agosto 2017.

Y renuncio a ser mujer, cuando el hombre en avaricia, piensa que soy como Alicia, o princesita de un cuento.
Me ve como un monumento, al que todos al mirar, se debieran de inclinar ante su suerte y victoria.
No soy posesión de nadie, no soy perra que te ladre, no soy oveja en rebaño del pastor del egoísmo.
Mi cuerpo es tan solo mío y me visto como quiero, me desnudo ante los vientos y a nadie le rindo cuentas.
Si me miras, ¡cuídate!, a ver cómo estás mirando, que tus ojos paseando van detrás de otra mujer.

Renuncio a ser maniquí de perversiones y ancestros que guardan en otros cestos tan solo restos de polvo.
Y como soy fiel guerrera del Ave del Paraíso,
mi trabajo siempre quiso apartarme de la noria
de aquella triste memoria de las mujeres de antaño.
Tapaditas y en casita mientras sus maridos vuelan, a ver si lagartas cuelan y les hacen el favor.
Mientras, lavan calcetines y tienden llantos a mares en la corriente continua del agua de su temor.
Renuncio, mi bien, renuncio, a ser para ti ese amor.

Karël.

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