jueves, 14 de marzo de 2013

TREINTA Y SIETE


Treinta y siete nínfas revolotean como mariposas en el estómago.
Treinta y siete sueños cumplidos como arrullos de vida.
Treinta y siete loas al placer de estar vivos.
Treinta y siete suspiros de pasión, ilusión y dicha.
Treinta y siete recuerdos que te hacen entornar los ojos y sonreir
Treinta y siete aspavientos ante el espejo de la música que suena.
Treinta y siete veces tus dedos contra el cristal del deseo voraz.
Treinta y siete misterios inocentes y ciertos.
Treinta y siete madrugadas soñando con la belleza de un nuevo día.
Treinta y siete estandartes cruzados al viento de la buena fe y la bonanza.
Treinta y siete años te hicieron tan dulce, tan dulce...
Treinta y siete coquetas miradas al placer de soñar.
Treinta y siete tablas de sumar y sumar y nunca restar.
Treinta y siete poemas son tus pupilas.
Treinta y siete besos puros y lindos sin una brizna de maldad ni pudor.
Treinta y siete rizos entre los dedos mientras en el regazo bailotea una novela.
Treinta y siete vestidos en tu perfil como piedras preciosas expuestos.
Treinta y siete maneras de pensar en el amor como consagración de la primavera.
Treinta y siete rosas rojas furiosas y tiernas.
Treinta y siete veces escuchar "Labios compartidos" en un atardecer eterno.
Treinta y siete milímetros que separan el bien del mal.
Treinta y siete admiradores del brazo de Cupido.
Treinta y siete loas a la vida vivida y por vivir.
Treinta y siete olas pequeñitas burbujeando reverenciales a tus pies.
Treinta y siete árboles ardiendo como nieve extraña.
Treinta y siete veredas, juntos de la mano la luz y la belleza.
Treinta y siete rascacielos pequeñitos posados a tus pies.
Treinta y siete sombras escondidas entre tu dulzura y tu vientre
Treinta y siete veces te negarán pero nunca te olvidarán.
Treinta y siete sueños adolescentes cumplidos en una mirada.
Treinta y siete valses en tu honor.
Treinta y siete elogios a la femineidad y al placer de la inteligencia.
Treinta y siete motivos de felicidad por la presencia de tu existencia.
Treinta y siete aplausos por el reguero y la confianza del trabajo bien hecho.
Treinta y siete ocasiones incidí que la vida fue un placer por saberte así.
Treinta y siete cumpleaños espléndida y generosa.
Treinta y siete frases para alegrar un cumpleaños bello y cálido.

GUILLERMO JIMÉMEZ FERNÁNDEZ -Mérida-

No hay comentarios:

Publicar un comentario