jueves, 7 de marzo de 2013

PUNTO FINAL


Se afeitó como pudo, era la hora.
Armó el bagayo y se quedó esperando.
La parca le batió “venga la llave,  
se  acabó tu pensión. Vamos andando”.

Y olvidao entre nubes y angelitos
 escurre que en La Nada no hay fandango:
reventó con tres millones en el bolso
y Dios no le da bola, ni coimeando.

Eduardo Pérsico -Argentina-
Publicado en el blog eduardopersico

No hay comentarios:

Publicar un comentario