Te veo a lo lejos,
Mójacar,
y te veo blanca.
Recostada en la ladera
de tu montaña de plata,
eres novia eterna
que luce sus galas blancas.
¡Ay si pudiera,
-si me atreviera, Mójacar-,
a subir hasta ti
en mi caballo de alas
y raptarte, Mójacar,
raptarte al alba!...
Del libro Mojácar de ARSENIO M. LÓPEZ MORADO -Cartagena-
DE FACEBOOK - 6740 - FOTOS
Hace 4 días
No hay comentarios:
Publicar un comentario