Mis manos rozan tu pecho y caderas.Tus excitantes piernas vibran
cuando tu sonrosada y húmeda fruta se abre para mí, por poseerla toda entera.
Mojada estás en sudor y jugos viscosos, rellena de placeres
donde la lengua quiere entrar a visitar los muros carnosos de tu caverna sabrosa.
Muero de ganas y quiero sentirte.Te abres ante mi.Tus muslos tiemblan y los toco.
Palpo tus nalgas suaves y araño tu espalda apretándote fuerte con cálido abrazo.
Froto mi cuerpo contra tus carnes mientras sientes la dureza de mi sexo punzante.
Quieres notarlo largo y lento. Ojalá no acabemos nunca.
La noche transcurrió envueltos en sudor y placer.
JOSEP ESTEVE RICO SOGORB -Elche-
miércoles, 11 de abril de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario