Una mansa claridad
invade los poros de la tarde
cuando arrasa
el otoño /
sus últimas hojas en vuelo.
Es entonces / cuando
por sosegados ratos
el monstruo del reloj
olvida / sus agujas
cuando los amortiguados pasos
del ayer / asoman
vestidos con muñecas de loza
/ y labios yertos.
Es entonces / cuando
umbríos corceles / regresan
con galope amenazante /
pletóricas / sus crines
de lágrimas perdidas.
Apresúrate, amado.
(No olvides que / la trocha
del reencuentro / es angosta
y las escasas brechas de luz
parecen suicidarse
hacia la premura del misterio
o ahogarse de pena
en un silencio incómodo
largo / injusto.)
Apresúrate
(Temo / que preguntan por mí.)
BELKYS LARCHER DE TEJEDA-Argentina-
DE FACEBOOK - 5734 - LO DICEN
Hace 3 horas
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