VOY CONTANDO

Un pájaro, dos pájaros,
tres pájaros, cuatro pájaros,
voy contando pájaros,
según pasan volando.

Este pájaro, aquel pájaro,
son, todos los pájaros.

Los, que se posan, en las ramas,
los, que se posan en los cielos,
los, que se posan en las brisa,
los, que se posan en las nubes,
los que pasan volando, los, que
sufren el destierro.

Un hombre, una mujer, dos hombres,
tres mujeres, cuatro hombres,
voy contando, hombres,
mujeres y hombres, hombres y mujeres.

Los, que se posan en las brisas,
los que se posan en los robles,
los que se posan en las horas,
los que se posan en los sueños,
los que suben a las nubes,
los que suben a los cielos,
mientras pasan volando,
mientras andan caminando.

Este hombre, aquel hombre,
esta mujer y aquella, son todas,
las mujeres, son todos los hombres.

Esos que se posan en la vida,
los que se posan en la brisa,
los que se posan en las ramas,
los que vuelan en el viento,
los que lloran las partidas,
los que siguen caminando,
detrás, empujados por el viento.

El pájaro, canta, la brisa baila,
el hombre y la mujer,
se enamoran, y el tiempo,
vas pasando, contándoles las horas.

Una hora, dos horas, tres horas,
voy contando horas,
según pasan cantando,
según pasan soñando,
según pasan volando.

Esta hora, aquella hora,
son todas las horas.

Las que, se posan en el cuerpo,
las que no paran en el tiempo,
las que se pasan volando,
las que nos envejecen,
las que nos están acabando.

Rafael Pérez