He tratado de convencerme, todos los días, de que nunca nos hemos conocido; engañando a mi corazón, diciéndole que tú ya no existes, que ya no me haces falta, pero me duele el alma, porque entre más te recuerdo más te deseo y esto me hace sufrir.
No puedes imaginar qué difícil se me ha hecho el querer olvidarte, porque te quiero. Aún perduran en mi mente aquellos gratos y vagos momentos de todo lo sucedido, aquel último atardecer de abril que nunca olvidaré, ¡Dios cuanto te extraño! Aún haces vibrar mi corazón, no lo puedo negar.
El tiempo pasa e igual sigo echándote de menos, aunque no quiera admitirlo, ¡qué insólito es mi corazón! ¿por qué me haces tanto daño si sabes que él ya no está en mi vida? Me cansé de llorar, de rogarle a mi corazón que volvieras, y me diste la espalda fríamente, ¿por qué tristemente te aburriste de mí, yo no era lo suficiente para ti? Me da nostalgia saber que nunca me quisiste como yo ti, ya tus palabras estaban llenas de mentiras ponzoñosas, solo fui una más en tu huerto, por eso tuve que decidir; alejarme para siempre de ti, haciendo de lado mis sentimientos, aunque me doliera el alma, pero la verdad es que, eras tóxico para a mi corazón..
Rosy Posy -Honduras-
No hay comentarios:
Publicar un comentario