De repente un destello
y apareciste tú,
me regalaste el nombre
y se apagó… la luz.
Donde estarás amada,
a donde fue tu luz,
hacia dónde has viajado,
donde te encuentras, tu.
Solo queda tu nombre,
de aquel momento, cuando,
apareciste, plena,
y se apagó…la luz.
Y me quede temblando
porque, no estabas tú,
y le pregunte a la noche
para seguirte… amando.
No apareciste… tú
te seguiré buscando,
y esperare el destello,
que me aproxime a ti.
DARWIN I. FLORES VARELA
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