lunes, 29 de diciembre de 2014

HOMBRE Y ANTENA


El hombre, en la azotea, abre los brazos como un espantapájaros. Ha adelgazado hasta parecer un tubo. Dos, cuando abre los brazos. El hombre está decidido a descubrir quién le roba una antena tras otra.

Del libro Cuentos de hombre y altura de FRANCISCO GARZÓN CÉSPEDES

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