miércoles, 24 de julio de 2013

A MANUEL INCHAUSPE, EN EL HOSPICIO

Las nuestras, mi amigo,
son obras pequeñas.
Escritas en la intimidad
y como con vergüenza.
Nada de tonos altos.
Nos parecemos a la ciudad
donde vivimos.
Perdiste tus últimos poemas
y yo casi no escribo.
De allí
esos largos silencios
en nuestras conversaciones.

ESTELA FIGUEROA (Santa Fe-Argentina)
Publicado en la revista Gaceta Virtual 76

No hay comentarios:

Publicar un comentario