jueves, 19 de abril de 2012

ATARDECER

La sangre del poniente
se esparcía.
Herida de muerte,
la tarde,
jadeando,
exhaló el último
suspiro sol del día.
Trémula,
extasiada,
me fui tiñendo de rojo.

EDITH VALDIVIA -Argentina-

No hay comentarios:

Publicar un comentario