AL OTRO LADO DE LA OSCURIDAD

Me gusta el otro lado de la oscuridad
me gusta cruzar las noches, imaginar que
soy invisible, pegarme a tu corazón, fundirme
con el sentir la dulce llama del amor
sé que somos compatibles al otro lado
de la oscuridad. Allí vi por primera vez
una luz limpia y extraña que hasta ese
momento desconocía. Allí descubrí como
mi corazón se estremecía.
Me gusta el otro lado de la oscuridad
donde lo imposible es posible,
donde no existe la palabra jamás.
Todas las noches sin faltar una
me escapo con paso seguro, invisible.
Tú está ahí lo noto, lo sé
esperándome al otro lado de la oscuridad
para darme con tu amor limpio, con tu
comprensión una lección de humanidad.
No me faltes nunca, no te vayas jamás,
déjame ser feliz, no dejes que se
me escape esta felicidad,
prométeme que siempre, siempre, estarás
esperándome al otro lado de la oscuridad.

Mª CARMEN REINA MÁRQUEZ-Conil-