Ese recóndito hueco
donde se hace polvo
el estruendo pálido
de la muñeca herida.
Se deshoja la piel;
Se hace polvo estéril
Tú con mirada lasciva.
Esquivo dudosa los fragmentos
de mi pasado tortuoso;
¡Abrázame luna!
que me entierran en pozo.
Sucumbe mi presente
a ese pájaro carpintero
que no halla nido
y se carcome mi deseo
sórdido e indecente.
Putrefacto el amor.
Ese instante en que
fuiste mío.
Que las polillas me roen;
me sorban la madera
rancia, de tu ausencia mullida.
Que el barro de tu cariño
turbio y barato
se desmembre, se haga trizas.
Como yo sin ti.
Que lo relativo del tiempo
sin tu amor de prostíbulo
se haga pulque de maguey
y te entierre en tres shot
de aguardiente y tequila.
Para rezurcirme sola.
Y renacer en muñeca
de porcelana fina.
Ya no de barro
Ya no de polvo
Ya no de ti.
Jazmín Noir Ovalle -México-
No hay comentarios:
Publicar un comentario