domingo, 3 de abril de 2016

9


He llorado
cubierto de sufrimiento
sin comprender
el dolor ni el calor del beso.
Sufro abrazado
a la hora
de los besos
o la hora de la muerte.
Con el corazón destrozado
regando las manos
huérfanas de tus ojos
lloran y lloran,
gime
y gime
y lloro
y sufro
y veo
mi alma
morirse lentamente
como cruel desquiciado.

Ken Sánchez -Perú-
Publicado en Archivos del Sur

No hay comentarios:

Publicar un comentario