Llega septiembre al campo, y llega Bienvenida
a la vendimia, entre la vid y los naranjos;
se le avisa a los vendimiadores, puerta a puerta.
Dicen que tal vez la cosecha sea eximía,
Por fin se llenarán los lagares, la bulimia
ya hoy no existe ni la rebusca...
-Dime, labrador y bodeguero-
¿por qué las viñas bailan y, preñadas
las uvas van besando los racimos
como si se tratara de una danza?
¿es esta que le baila, esta chiquilla? -mi paisana-.
¡Que agradable aroma a mosto sale por la ventana!
que gratos recuerdos de cuando yo pisaba,
y cómo a mi cada vez que puede me acecha la nostalgia;
-vendimiadora, como te recreas en esas uvas negras-.
Gastoreña que de la tijera haces prestancia,
protégeme esos frutos que con mimo,
una vez fermentado será mosto;
y merced al dios Baco se harán vino...
Vosotras, cepas ya lo habéis dado todo,
ahora semi desnudas, con demacrados rostros,
madres desheredadas, desconsoladas y viudas;
ahora a esperar al podador y labrador,
para que se os adecente y os pongan guapas para pasar
el invierno, que el vino coja cuerpo y tú: "Bienve"
a tomarte unos vasitos junto al "montejaqueño"
RAFAEL CHACÓN
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