Pasó sin darnos cuenta,
en un principio lento,
sin apuros, sin prisas,
sin preguntas, sin miedos.
Sin dramas que asustasen
a nuestros corazones,
sin dudas que mancharan
el finísimo manto que
cubre la odisea del deseo
impetuoso.
Todo fue sobre ruedas,
comentarán algunos,pero
tu y yo sabemos
que fueron las miradas
sinceras y los besos que
inventaron tus labios y
los míos sucumbieron
como se entrega el día
cuando asoma la noche.
En un principio, fuimos dos
niños asombrados que ya
ya peinaban canas que los
besos borraron.
Viola Valvidares Carrera
Hola,
ResponderEliminarSoy Viola, autora del poema. Me encantaría poder contactar con vosotros y agradeceros que hayáis decidido publicarlo en vuestro blog.
Un saludo,