INMORTAL

Inmortal,
tú
debajo de mí,
sin-
fonía,
alucinante
cadencia
de la carne
que se quiere
eterna...

Busca
como refugio
una
caverna
que es antigua
y sabia,
nido de piel
caliente
y haz
las paces
para siempre
con todo...

Mata lejos de mí
las agudezas,
el puesto fijo
de guardia
en las alturas
y bájame a la tierra
que amo,
a tus ojos,
camino
del milagro...

Déjate hacer,
sé
solamente
manos
sobre mis manos,
labios
sobre mis labios
y calla
lo que sobra
que muera
en silencio...

Emigra
definitivamente
dentro,
nunca la piel
fue frontera
sino puerta
o ventana,
puente,
pasadizo,
al final
será la sangre,
no la Historia,
quien hable
de nosotros...

Carlos Bonino