EL ARTIFICIO DE ESCRIBIR

Me encanta escribir, precisamente, cuando tengo la mente en blanco. Es el reto que todo escritor asume, cuando la memoria está en reposo. Es en ese estadío donde pueden brotar las ideas y la creatividad. El arte de escribir es grandioso: es un modo de comunicar, que va más allá del lenguaje corporal, del lente de las cámaras o de una cabina de radio.El escritor posee una fuente inagotable- envidiable-, es un pozo petrolero que hay en el litoral de sus neuronas. La comunicación del lenguaje escrito, refleja siempre, el vinculo del papel y la pluma, influidos por la imaginación del escritor, en la que muchas veces cuando está en el momento mas fluido de la lírica, surge toda clase de atributos que posteriormente le son reconocidos. El compromiso con la comunidad lectora, es muy intenso, por esa conexión que hay entre ambos, ya que debe ser honesto y sincero.No puede obviar su rol como comunicador y educador, porque la información es, lo que dará al traste, de que los nutrientes literarios, sean bien asimilados, por los que dan seguimiento a las pautas, que trazan sus orientaciones. El escritor difunde sus ideas basadas en hechos imaginarios o reales, y lo concretiza en diferentes géneros, ya sea en el periodístico, poético, o a modo de ensayo; eso-dependerá de la temática que cultive. Hay dos cuestiones preponderantes, según Tolstoi, acerca de lo que es el arte de las letras: ’’que no estamos solos y que podemos comunicarnos’’.La literatura establece un vínculo entre el sujeto y la humanidad, porque es una forma de conocer nuestra historia y que de no ser así, entonces somos unos salvajes. La literatura es un gran pie de amigo: un gran libro, es como la partitura del músico, que interpreta la experiencia creativa del autor.Por eso el escritor adquiere un valor extraordinario, porque desde el punto de vista fisiológico, le deja al lector un espacio para poder ejercitar el cerebro, y que este sea capaz de interpretar el contenido de cualquier género, para poder tener una opinión sobre si mismo.

Carlos Martínez Márquez
Publicado en el blog lunadesalymiel