martes, 26 de febrero de 2019
¿ESCRITOR Y EDITOR?
-Escribir y ser bueno no basta, ni siquiera se acerca a nada, ahora, el mundo está demasiado lleno de información, de excelentes perdidos, mediocres famosos y también revelaciones de buenos y reconocidos, Internet nos catapulta debajo de millones de palabras, a veces ninguna dice nada pero si es que llega a decirlo, no importa ¡Todo está tan revuelto! Llueve información y tienes que andar pescando la verdad y comprobando a ver si lo que has leído es cierto indagando portal tras portal en la red, llueven escritores por todos lados y lo más insólito es que cada vez se leen menos libros.
-Bueno, creo que exageras ¡El mundo cambió! eso hacen las revoluciones, no tienen vuelta atrás, transforman y hay que adaptarse, no queda otra, nos guste o no, fíjate por ejemplo, la Revolución industrial ¿No cambió absolutamente todo? Nos venimos destruyendo desde entonces, claro, también han surgido millones de maneras de salvarnos, es como estar en una montaña rusa, vamos haciendo mientras deshacemos, igual sucede ahora con Internet, vino para quedarse, la cuestión es cómo nos sobrevivimos allí ¿No debería nacer un escritor nuevo acorde a la nueva realidad?
-Creo que acto de crear, de inspirarse enfrentándose al vacío de la hoja en blanco ha transmutado, basta entrar en las redes para ver la forma como lo ha hecho, millones de seres publicando en las mismas telarañas donde tú y yo participamos, lo que intento es ir más allá, ese “nuevo” escritor ha tomado la opción de la auto edición y aunque no tengo las respuestas, sé que el proceso necesita redefinirse. Puede que se cansen los ojos, pierdas horas buscando algo que no hallas mientras la vida sigue con el reloj en la mano. La inspiración debe ahora ir a la Universidad, no está permitido que aflore y salga a volar, le toca aprender a venderse, ser experta en markenting, manejo de redes, búsqueda de seguidores ¡Un producto más! Si tienes el don de saber cómo hacerlo, entonces, puede que alcances tu momento estelar pero si careces de esas “virtudes” aún aunque publiques ¡No sucede nada! te destruyes en medio de la impotencia ¿No deberías dedicarte a escribir y otros a asistirte en lo que no sabes ni tiene qué saber?
-¡Que oscurantismo! Entonces ¿Nada qué hacer? ¿Nos dedicamos a llorar? ¿Nos vamos a un bosque como “Unabomber” el genio que no pudo con la vida social? ¿Vivimos así tal como hizo, un anti héroe solitario rumiándose las ideas al margen del planeta, luchando contra la Revolución industrial después de ciento setenta años? ¿Mandamos cartas explosivas para hacernos sentir? Creo que se trata de un acto de aceptación ¡Es lo que hay! No podemos aislarnos, es imposible.
-¿No te das cuenta que ya estamos aislados? ¡Absolutamente solos! La alienación se llevó todo por delante y nos dejó pedazos de hielo como alternativa. Si te permites el “lujo” ver el fondo de los ojos, los propios ante el espejo, descubrirás que deambulas en la cruda soledad existencial ¡Es otra soledad! no la creadora, es la daga que punza el pecho si no has aceptado que estamos absolutamente solos porque así el planeta esté atiborrado de gente, la realidad es que somos la sumatoria de seres solitarios pero ¿Quién quiere saber a qué sabe su sangre en la boca? Somos la plusvalía de alguno ¡No hay escapatoria! luego, como necesitas escribir te hundes en tu océano, después puede que te invada la tentación de publicar y allí, te saltas el abismo que implica la penetrante lupa de editar y puede que no poseas las herramientas para hacerlo ¡Es tanto el ego! Me escucho y hasta risa me da.
-No pareces estar riendo.
-¿Quieres saber mi verdad? ¡Nunca jamás me había reído tanto! es una risa siniestra, cínica, llena de ira y decepción ¡Así pagamos el ocio de dilucidar! Es la noche del hoy.
-Suenas a herida abierta…
-¿Será? A propósito ya que hablaste de theodore-kaczynski “Unabomber”, te leo la introducción de su Manifiesto:
“1. La Revolución Industrial y sus consecuencias han sido un desastre para la raza humana. Ha aumentado enormemente la expectativa de vida de aquellos de nosotros que vivimos en países «avanzados», pero ha desestabilizado la sociedad, ha hecho la vida imposible, ha sometido a los seres humanos a indignidades, ha conducido a extender el sufrimiento psicológico (en el tercer mundo también el sufrimiento físico) y ha infligido un daño severo en el mundo natural.”
-Lo cité pero no alabándolo, más bien para resaltar su nada inocula locura, como no puedo insertarme a la sociedad, me voy a un bosque y comienzo a elucubrar cómo hacerme notar, explosivamente.
-Hasta un “demente” puede decir verdades y seguir enloquecido, posee un coeficiente de 167, califica para genio pero eso no lo libera pagar por sus acciones. Como niño prodigio, se saltó muchos pueblos en el proceso educativo pero no en el emocional ¡Un niño es niño! Así tenga la capacidad intelectual para trabajar en NASA o en la NSA. La cuestión es que sí, de adulto se internó en un bosque y vivió al margen de la tecnología, rechazaba el resultado de la Revolución Industrial conditio sine qua non de la atrofiada actualidad, si ya venía estresado la CIA lo remató con sus experimentos. Si he citado a Unabomber ha sido tan solo para resaltar que él se apartó de la sociedad, se fue a vivir solitario en su cabaña, sin agua corriente ni electricidad ¿Podemos vivir así? ¡No! Definitivamente, todos estamos enajenados en diferentes porcentajes pero creo que hay que estar claro en cuanto a que lo estamos y si bien no libera, ubica. Retomando el asunto de los escritores, agregando además que no somos Unabomber, el promedio de los escritores han visto el umbral abierto con la auto edición pero ser escritor no te hace editor, son dos realidades distintas, de hecho pueden existir editores que no escriban pero sin duda, deben ser ávidos lectores, además, es su trabajo, están preparados para hacerlo. Todo está tan desmembrado que hay escritores que no leen.
-Hay millones de personas que no leen.
… pero estamos hablando de escritores que pretenden ser editores y no son ni siquiera, buenos lectores. La cuestión es que si bien la auto edición ha permitido que escritores desconocidos puedan publicar y antes esa posibilidad pertenecía a “elegidos”, no dejo de pensar que el arte de editar va desapareciendo y no debería, quizás tenga que replantearse eso sí. Amazon con su negocio promocionando sin ningún parámetro selectivo, la editoriales que ofrecen el sistema de la auto edición, son prácticamente imprentas, aceptan a todo quien desee publicar sin que medie ninguna selección ya que no tienen responsabilidad del contenido considerando que recae en el escritor todo el peso de evaluar su obra, si tiene errores, si la portada es un desastre, si sobra, si falta, le dan la oportunidad de auto revisarse pero ¿Podrá ver más allá con ojos distintos? Editar es más que reparar errores ortográficos, implica desmenuzar la obra, detectar su posible calidad y contenido, asombra que existan más libros que nunca y menos lectores de libros.
-Entonces ¿Está mal la auto edición? ¿No es una gran oportunidad que antes estaba limitada a una élite? ¿No ayuda que los escritores desconocidos puedan hacerlo? ¿No están pagando? Creo que tienen derecho como el que más.
-No estoy en contra, si pagas puedes, es así exactamente. He leído maravillas que todavía pertenecen al mundo privado de excelentes escritores desconocidos, me parece que debería publicar así sea por auto edición porque son simplemente geniales, es mi punto de vista, no obstante, un editor podría considerar que algunos capítulos deben reformularse, incluso, eliminarse, posee la experiencia y conocimiento para saber qué desaparecer y qué dejar intacto. La cuestión es que si deseas esos análisis, el costo sube, si deseas proyecciones de mercado, sube más y así sucesivamente, no todos pueden pagar eso y muchos escritores se auto editan buscando el menor precio posible y puede que hayan necesitado asistencia de un profesional.
-Las redes son un apoyo para esos escritores que mencionas, pueden publicar allí sin ningún costo.
-Las redes son un enjambre atizado de tanta información que es fácil perderse sobrecargando las pestañas con nada y en medio de eso, los escritores de calidad están girando en la misma elíptica. Internet permite que se publique “gratis” pero lo cierto es que pagamos con la información que ofrecemos, la analizan, la venden, se crean tendencias, se conoce qué quiere el mundo. Las editoriales tradicionales y con tradicional no me refiero a algo arcaico, hacen la profunda y extenuante labor de leerse un libro, desmembrándolo hasta pulir el posible diamante que allí se anida. El avasallante comercio de los libros, los escritores necesitados de publicar en papel y no solo en redes, en fin, muchas aristas en el fractal, tantos libros sin destino y algunos, obras maestras perdidas. No tengo las respuestas pero sé que hay que retomar el tema.
-¡Eres tan oscura!
-¡Gracias!
Scarlet C
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