DELIRIO Y PASIÓN

Entre el delirio y la pasión en mi corazón sobreviene un ridículo debate,
Hay una gran controversia entre mi corazón y mi cuerpo,
A los dos les quiero dar placer y que lleguen a un empate,
Pero los dos son necios y se esmeran en su agria discusión,

El corazón está encaprichado en saborear dulce besos y abrazos,
Mientras el cuerpo demanda probar besos apasionados e intensos,
El corazón se deja llevar por suaves jadeos y tiernas caricias,
El insensible cuerpo quiere gemir y gozar de locas y desenfrenadas lujurias,

Los dos me desesperan de este ridículo combate,
Aunque acepto que es algo sumamente excitante.
Pues, yo tengo que degustar los afectos para tomar la decisión final de este debate,
No entiendo por qué la contienda si los sentimientos los percibo en mi mente,

Martha Reyes