Permíteme, esta noche te sacaré yo la ropa,
seré tierno, apasionado y sé que te gustará.
eres mi niña, apenas es nuestra segunda cita
y la vergüenza ronda en tus ojos trémulos.
Pudor que dejas a un lado cuando mis manos
te llenan de huellas, caricias perplejas y suaves,
dejas caer tu ropa cuando ya te la he desprendido,
tu desnudez tiene el propio brillo de las estrellas.
Te dejas amar, hasta las costillas se enamoran,
huesos que absorben los besos de mi boca,
succión de lenguas que se pierden melosas,
los cuerpos que se atraen por la piel deseosa.
Permíteme que yo te lleve a disfrutar de todo,
al columpio del amor más elevado y loco,
súbete a este juego que marea pero agrada,
luego al subibaja de las pelvis que se atan...
Y así con este vaivén de arrebatados vértigos
llegar al éxtasis desenfrenado y pertenecernos,
tendremos alas, seremos pájaros en vuelo
para aterrizar con ese clímax muy adentro.
SIL TORRES -Argentina-
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